Nallely Sarahi Ramirez tenía poco más de tres meses como oficial de la policía en Apodaca Nuevo León. Su formación policial la había realizado con un excelente promedio y su ilusión, era formar parte de la fuerza policial en Apodaca Nuevo León pero, su opinión cambió drásticamente cuando comenzó a sentir los abusos de los jefes de esa corporación.
“El acoso llegó a tal grado que un día, mientras yo estaba sentada en el baño, llegó uno de los mandos y me abrió la puerta para verificar que yo estuviera realizando una necesidad”, cuenta Nallely Sarahi.
Cansada de los abusos que asegura recibe principalmente por tener preferencias sexuales diferentes a las de sus colegas, este miércoles acudió a presentar una denuncia penal por los maltratos y al comparecer ante el fiscal del fuero común, asegura fue “secuestrada” por policías que envió la Jefa de Seguridad Pública de esa entidad Perla Martínez.
“Yo estaba cansada de tantos malos tratos, me cruce la calle de aquí de la corporación después de pedirle permiso a mi mando inmediato para ingresar al CODE y presentar la denuncia en contra de Chapa, de Perla y de el Capitan Gustavo. Mientras comparecía ante el Agente del Ministerio Público, llegó Chapa y comenzó a insultarme delante del Fiscal, yo le dije que iba a proceder y él comenzó a estrujarme para sacarme de allí”, cuenta la policía, “fue entonces que la Fiscal intervino y corrió a los policías de ese lugar y a mi me trasladaron a otro sitio”, señaló.
“Más tardé en llegar… cuando ingresé, llegaron otros policías. Chapa y la Secretario los habían mandado, me sacaron de allí, me llevaron en contra de mi voluntad. La gente estaba sorprendida de lo que pasaba… Yo estaba siendo secuestrada por mis propios compañeros y lo consiguieron”.
Después de esas acciones, Nallely fue conducida a una oficina dentro de la Secretaría, Ahí fue sometida a presiones psicológicas.
Por casi una hora la oficial estuvo retenida en contra de su voluntad en las instalaciones de la policía según narró en la denuncia penal que pudo presentar hasta este jueves.
“La Secretario me dijo que a ella le daba igual si me quedaba o no, que para ella yo ya estaba fuera de la corporación”, contó.
“Me querían obligar a firmar mi renuncia pero no lo hice, no firme y no les voy a firmar porque lo único que estoy reclamando son los mismos derechos que defendemos en la calle de los habitantes que cuidamos”.
“A diario, yo tenía que soportar insultos como “machorra”, lesbiana, entre otras tantas cosas que me decían los jefes por ser gay”, cuenta Nallely.
“El acoso de los jefes era tal que se molestaban porque me pintaba, si iba con mi peinado, con algo de maquillaje; siempre les molestaba. Ellos me decían que yo me maquillaba como prostituta”.
La intolerancia hacia su sexualidad asegura la servidora pública, la llevó en varias ocasiones a quedarse arrestada simplemente porque a su superior, identificada solo como comandante Lili, no le parecía que platicara con los ciudadanos.
“Un vez estaba enojada porque decía que yo perdía mucho tiempo platicando con los ciudadanos, y me mandó a cuidar una brecha a bordo de una patrulla… Yo obedecí, aunque esa ocasión según para que aprendiera, me mandó sola y sin armas a cuidar esa brecha…”
Según la denuncia presentada en Apodaca Nuevo León, que quedó instruida ante el Agente del Ministerio Público Jorge Alberto Hernández Charles, quien inició carpeta de investigación por los delitos que les resulten a los oficiales Perla Cecilia Martinez y Miguel Gerardo Hernandez Chapa, a quienes identificó Nallely como sus principales perpetradores. La primera de los identificados funge como Secretario de la Policía Municipal en Apodaca Nuevo León y, el segundo, como jefe de la academia de la misma corporación.
Ante la complejidad del caso, el Agente del Ministerio Público del Estado solicitó medidas de Protección para el Servidor Público, mismas que se autorizaron.
“Por todo lo antes expuesto y tomando en cuenta los hechos que integran la investigación y que deriva la necesidad de garantizar la seguridad física y psicológica de la víctima, se le concede obtener los beneficios de las medidas de protección consistentes en: Vigilancia en el domicilio, protección policial de la víctima u ofendido, en este caso a: Nallely Sarahi Ramirez Medrano, auxilio inmediato por integrantes de instituciones policiales al domicilio, o en donde ésta se localice”, señala la resolución de la autoridad ministerial.
El documento elaborado por la Procuraduría de Justicia de Nuevo León, del cual SINPELOS.MX tiene copia, también señala que la policía denunciante corre riesgo o peligro -toda vez que la misma fue objeto de daño en propiedad ajena, y el que le resulte por parte de Perla Cecilia Martinez y Miguel Gerardo Hernández Chapa”, reza parte del protocolo de la PGJNL, ordenando a Fuerza Civil se haga cargo de la seguridad del agente del orden de Apodaca Nuevo León.
Nallely, salió del estado durante éste mismo jueves, no sabe si volverá pues sabe se ha metido con gente muy poderosa en el municipio, pero lo que busca, es demostrarle a sus compañeros de trabajo, que no están solos. Haciéndoles ver que existen instituciones que pueden apoyarlos.
Según Nallely y por lo menos tres oficiales más entrevistados para este reporte, dentro de la corporación existen abusos, discriminación, desprecios e intolerancia hacia el personal policial del que se presuma sea homosexual pues ella no es la única gay que trabaja allí como policía.
“Yo salí en marzo. Recibí acoso sexual y cuando me quejé, solicitaron mi renuncia”, aseguró otra oficial entrevistada… Su historia podrás conocerla mañana…