Monterrey Nuevo León. México.- (16:21) Nariz, pómulos, frente y mentón le habrían sido reconstruidos con cirugía plástica en meses pasados al detective de la Agencia Estatal de Investigaciones Alfredo Ortega Trujillo, policía que es señalado por un empresario sampetrino de haberlo secuestrado y torturado en enero del 2016.
Una fuente conocedora de la investigación reveló que el detective habría ingresado a un Hospital de Gobierno en donde le practicaron la reconstrucción facial.
“El 25 de Febrero ingresó a quirófano en el Hospital Universitario, prácticamente le iban a cambiar toda la cara”, señaló un empleado del Hospital que ha pedido su nombre se mantenga en anonimato pues no está autorizado para hacer comentarios sobre el tema.
La Fiscalía de Justicia de Nuevo León confirmó la investigación sobre las cirugías realizadas al rostro del ex detective pero se negó hacer comentarios al respecto.
“Si, seguimos una linea de investigación en ese sentido… pero no puedo dar más detalles”, reveló el informante de la Fiscalía.
Documentos oficiales en poder de este medio, revelan que la Fiscalía de Nuevo León busca al detective Ortega Trujillo para hacerle un interrogatorio sobre su aspecto, y hacerle de su conocimiento a la víctima los cambios que ha sufrido el agente en quien recaen los señalamientos directos del secuestro.
El Director General de Ladrillera Mecanizada Agustín Villarreal Budnik, se negó a realizar comentarios sobre este caso en particular, limitándose a contestar que tiene la esperanza que ahora si el Vice Fiscal Luis Orozco actúe conforme a la ley y haga justicia.
Villarreal Budnik, fue secuestrado en enero del 2016 por un grupo de hombres armados que eran encabezados según el empresario, por el detective Alfredo Ortega Trujillo. Según narró Budnik, su padre y hermano habrían orquestado el secuestro para tratar de presionarlo a que cediera a ellos unos 400 millones de pesos de acciones de Ladrillera Mecanizada, empresa en disputa tras el divorcio de sus padres.
Budnik habría revelado una amistad que existía entre su padre y Jaime Rodriguez Calderón, “El Bronco”, de quien sospecha, bajó la orden a su jefe de Escoltas Carlos Guevara, entonces jefe de la “GUBERNAMENTAL”, para que orquestara el secuestro y lo ejecutara.
El grupo de agentes que realizó el secuestro, quedó establecido en las investigaciones impulsadas por la defensa particular del empresario, estaban asignados al Grupo especial llamados Gubernamental, todos bajo el mando del jefe de escoltas de El Bronco, y rendían informes solo al Gobernador directamente, a nadie más.
De aquel secuestro, Budnik, habría logrado escapar brincando por la ventana de la casa de donde lo tenían cautivo en Apodaca. Tras fugarse, el empresario acudió a presentar su denuncia ante la entonces Procuraduría Estatal, donde ha sostenido que sus secuestradores eran agentes ministeriales.
Meses después de iniciadas las investigaciones se estableció que los policías hicieron unas llamadas telefónicas a la familia de Budnik mientras lo tenían secuestrado. Una voz al teléfono ordenaba a la familia que les entregaran 20 millones de dólares por la libertad del empresario sampetrino. La voz al teléfono se pudo confirmar era de un agente ministerial que ya tenía experiencia en ese tipo de negociaciones pues otros audios en poder de las autoridades lo vinculaban con más secuestros en el estado. Ese agente fue asesinado tiempo después en el estacionamiento del Ofice Max De san Pedro, en una ejecución polémica pues se llegó a mencionar que la presencia del agente ministerial ahí, obedecía a una reunión gansteril también relacionada con el pago de un secuestro.
Tras las inacción de la Procuraduría para resolver el secuestro, Budnik y sus abogados buscaron ayuda federal, logrando obtener de la SEIDO, un dictamen forense que establecía que la llamada realizada por aquel agente ministerial que pedía los 20 millones de dólares por la liberación del empresario había salido de las Oficinas donde despachaba el entonces Procurador Roberto Flores Treviño.
Para la víctima era evidente que el estado estaba protegiendo a su secuestrador… Un policía que se encargaba de hacer el trabajo sucio de una administración lo mínimo que podría pedir a cambio era justo eso: protección, revelaban.
Ninguna de las declaraciones de Budnik provocaban que se le hiciera Justicia. El Procurador Roberto Flores le había negado a la víctima el derecho de conocer los rostros de los detectives que trabajaban dentro de la corporación policial. Budnik tenía muy claras las facciones de su agresor…
“Lo recuerdo perfectamente, se quien es, tengo su tono de voz, se que si veo la fotografía de él lo voy a reconocer inmediatamente”, aseguraba Budnik, pero con Flores Treviño al frente de la Procuraduría no lo pudo conseguir.
El 21 de Febrero del 2017, Roberto Flores Treviño renunció a la Procuraduría del estado de Nuevo León. Fue su relevo Bernardo Gonzalez quien habría aceptado entregar a Budnik 900 fotografías de los detectives de la Agencia Estatal de Investigaciones. En esas fotografías Budnik reconoció a Ortega Trujillo, estaba seguro que era él pero pedía verlo en persona para saber con plenitud si se trataba del agente que lo había secuetrado.
El 6 de Febrero del 2018, Budnik fue citado a la Oficina de quien fuera el nuevo Procurador; Bernardo Gonzalez Garza, y ahí, mientras hacia antesala, ante él pasó el hombre al que señalaba como su secuestrador…
“Me vió, se sonrió… me saludó. Volví a oír su voz… era él…. Me quedé pasmado… No sabía que hacer..Comencé a sudar frio… Cuando entré a la Oficina con Bernardo le dije: ahí esta el que me secuestró… Él solo me miró.. bajo la cabeza y se lamentó… Pero no hizo nada”.
Las solicitudes para realizar un careo entre Budnik y Ortega Trujillo siempre se evadieron. El propio Fiscal que representaba al Ing, Agustín Villarreal, cometía pifias jurídicas para que no se autorizaran los careos en las cámaras gesell y lo consiguieron por mucho tiempo.
A partir de ahí, los abogados particulares de Budnik fueron rechazados de las audiencias. Al grado de prohibirles que acudieran a las citas pero con recursos de amparo, se logró que los asesores de la víctima volvieran a conocer de la carpetas y el curso de las investigaciones.
Bernardo Gonzalez también evadió ejercer acción penal en contra de Alfredo Trujillo… El cual había hecho declaraciones falsas para tratar de justificar que el día y hora que se cometía el secuestro se encontraba resguardado en el edificio de la Policia Ministerial, pero su dicho, fue desvirtuado por los abogados de Budnik.
La salida de Bernardo Gonzalez se da en medio de una reestructura de Procuraduría a Fiscalía, y ahí, arribó el personaje que en teoría más ha hecho por el caso, Gustavo Guerrero, quien tras su llegada, ordenó desarmar a Ortega Trujillo y separarlo de su cargo para que enfrentara la acusación que pesaba sobre él pero, un grupo de agentes y vehículos blindados le fueron asignados como protección… Gustavo Guerrero, nombró a un Fiscal Especial para que investigara el caso pero tampoco pudo llevar a las Camaras Gesell al detective, inhibiendo a la víctima en múltiples ocasiones para que pueda identificar plenamente a su secuestrador.
A la fecha y, tras la presunta cirugía estética de rostro, Alfredo Ortega Trujillo, se se cree también se tatuó uno de sus brazos, piezas claves pues son las zonas que más identifica Agustín Villarreal Budnik.
La investigación de la Fiscalía de Justicia ahora, también apunta al Municipio de García Nuevo León, en donde hoy, es alcalde el ex jefe de escoltas de El Bronco, Carlos Guevara… Y de quien se sospecha, es el orquestador del secuestro del Director General de Ladrillera Mecanizada.
Los asesores de jurídicos de la víctima y la Fiscalía de Nuevo Léon creen, que Alfredo Ortega Trujillo, después de reconstruirse el rostro fue llevado a trabajar como jefe de escoltas del ex Mando de la GUBERNAMENTAL, y actual alcalde de Garcia, Carlos Guevara….
- Veracidad
