Por Gerardo Esqueda
Los Sultanes de Monterrey parece que dan señales de vida rumbo a las campañas de 2018, luego de que anunciaran en sus redes sociales los cambios de dos peloteros a Leones de Yucatán.
Luis Juárez y Walter Ibarra, Jardinero Izquierdo y Short Stop, respectivamente, fueron enviados a los melenudos a cambio de Ricky Álvarez y el joven Outfielder Francisco Lugo.
Pese a que en el papel, el cambio luce “desproporcionado” a favor de Yucatán, debido a que los jugadores ex de Monterrey, cuentan con un currículo extenso en liga Mexicana de Verano e Invierno, en la práctica pudiera ser de beneficio para ambas organizaciones.
Luis Juárez, quien el año anterior fue campeón de bateo en la Liga Mexicana del Pacifico, ha ido incrementando sus números en los últimos años en el beisbol
Sin embargo, hay que hacer mención de que Juárez ha sido suspendido por problemas de dopaje en dos ocasiones y una más podría ser el término de su carrera deportiva por las reglas tan rígidas que han impuesto las Ligas Mayores (MLB) y que rigen la liga de Verano en México (LMB).
Aunado a que al terminar la campaña pasada, “el pepón” como es conocido, fue conminado por la directiva de Sultanes a que descansara en la etapa de invierno para que estuviera al cien por ciento en el arranque de las campañas de 2018.
Cuando jugador y organización habían llegado al acuerdo de que Luis Felipe se quedara en Monterrey, realizando un trabajo especial para rehabilitarse de una lesión en la espalda baja con personal medico especializado y además una dieta especial, el oriundo de Culiacán, dejó “tendidos en el terreno” a los directivos regiomontanos, al aceptar una oferta salarial de los Caballeros Águilas de Mexicali para jugar en la LMP.
Ante tal situación, según fuentes allegadas a la directiva regia, optaron por aceptar una oferta de cambio que vino de la organización de los Leones de Yucatán, que habían estado insistiendo desde el final de la temporada 2017 por hacerse de los servicios del también primera base y cacher.
Mientras que Walter Ibarra, pese a que tuvo un 2016 destacado con los Sultanes, cuando bateo .329 en 103 juegos, este año que culminó, no pudo recuperarse de una lesión que le aquejaba en la rodilla.
A cambio, Monterrey, recibirá a Ricky Álvarez, que tuvo una gran campaña este verano al producir 105 carreras a home y batear .311 en 109 juegos que jugó con Vaqueros Laguna y Leones de Yucatán.
Paradoja Sultán
Lo más “paradójico” del cambio es que Álvarez es un jugador que debutó en Liga Mexicana con Monterrey en 2012 y luego fue cambiado a Tabasco porque no dio “el ancho”.
Sin embargo, y tras casi ser “echado” por Monterrey, Álvarez fue rescatado por Laguna en donde vivió grandes momentos hasta convertirse en ídolo de la afición Lagunera hasta que lo cambiaron a Yucatán el año anterior. Ahora Monterrey, tuvo que dar jugadores a cambio para traer de nuevo a Álvarez.
Además de Ricky, Sultanes recibirá al prometedor jugador Francisco Lugo, que tras jugar varios años en sucursales de Grandes Ligas, fue repatriado por los Tigres de Quintan Roo, quienes lo cambiaron a Yucatán que terminó prestándolo en varias ocasiones hasta que le “sacaron provecho” incluyéndolo en el cambio junto a Ricky Álvarez.
Mientras en la oficina de Sultanes realizan cambios en su roster, aún queda pendiente que se haga oficial el nombre del nuevo manager que encontrará una gran base mexicana que tendrá que hacer triunfar en los dos torneos venideros en 2018.