- En primer lugar, hay que entender que la piel es, a diferencia de los tejidos, un material orgánico, es decir es “materia viva”, por lo que su limpieza y mantenimiento es distinto al que se debe realizar con sofás de tela. Un sofá de piel, tiene como ventaja sobre uno de tela su larga vida, siempre que se le dé un mantenimiento adecuado. La piel cuidándola y nutriéndola periódicamente es “eterna”. El cuidado que hay que dar a un sofá de piel, es prácticamente igual que el cuidado que damos a nuestro cuerpo al ducharnos y, acto seguido al darnos un baño de crema por todo nuestro cuerpo para mantener nuestra piel nutrida, elástica y sana. Bueno, pues lo mismo hay que hacer con nuestro sofá o sillón de piel. Primero le pasamos un paño de algodón limpio y humedecido en agua con “jabón lagarto” (PH Neutro), para quitar el polvo y las impurezas superficiales. A continuación, le pasamos con otro paño seco impregnado en crema hidratante, (no hace falta que sea una crema específica, puesto que como hemos dicho al principio, la piel vacuna de un sofá, es prácticamente igual a nuestra piel, y requiere el mismo cuidado y mantenimiento). La crema Nivea del “bote azul” que todos tenemos en casa, es perfecta para nutrir e hidratar nuestros sofás. Según la humedad del lugar donde vivamos, es necesario hidratar con más o menos frecuencia nuestro sofá. Como ejemplo, en Madrid (España), con dar un baño de crema a nuestros sofás una o dos veces al año, es suficiente. Sin embargo el pasarle el paño húmedo para quitarle el polvo y la suciedad diaria, sí es conveniente hacerlo con frecuencia, porque no solo mantenemos limpio nuestro sofá, sino que también lo hidratamos, aunque solo sea con el paño humedecido en agua jabonosa. Un buen cuidado y mantenimiento de nuestro sofá de piel, evita que con el tiempo se acartone y se cuarté, apareciendo pequeñas grietas y rajas, que además de ser antiestético, hacen que el sofá pierda radicalmente su comodidad y confort. Esperamos haberles sido de ayuda y haber desvelado dudas que hasta ahora teníamos a la hora de limpiar nuestros sofás de piel.